En bolsas son abandonados gatos en la esquina de la Escuela Leonardo Tascón

BUGA - Si bien es cierto el tema de la clasificación de las especies, es de igual manera importante que los seres humanos debamos aprender a convivir con los animales, en especial con los domésticos, pero sin lugar a dudas el ser racional es cada vez más agobiante, intolerante y en muchas ocasiones desborda su ímpetu.
El comentario obedece a que en reiteradas oportunidades, se han venido observando gatos en la esquina de la sede educativa Tulio Enrique Tascón de la calle 13 con carrera 9A, del barrio Santa Bárbara de esta ciudad.
La situación ha generado malestar entre quienes conservan en su corazón un espacio de amor, ternura y aprecio por la especie animal, como los gatos, es por ello que hasta la Redacción del Semanario el Periódico se han acercado varios habitantes del barrio Santa Bárbara a manifestar su inquietud, a fin de que las personas que están cometiendo este atentado contra los animales indefensos, procuren en lo posible brindarles un albergue y evitar la proliferación de ellos.
En igual manera manifiestan los quejosos que estos gatos mantienen en las instalaciones de la sede educativa conllevando a que las heces y el orine puedan causar afecciones en la salud de la población estudiantil.
Ante toda esta serie de inconvenientes que se generan por la aparición constante de gatos en esta esquina, algunas personas le llevan comida y agua para que no mueran de hambre, pero se requiere de un hogar para que de esta manera no incomoden en la calle.
Hasta en la Inspección de permanencia del barrio llegan en busca de refugio estos animalitos, pero difícilmente se pueden dejar ingresar allí, dado que por su condición de juguetones, pueden deteriorar muchos expedientes e información escrita que se encuentra en los archivos.
Los vendedores del parque han indicado que los gatos son abandonados allí en bolsas por personas que ni siquiera viven en el sector y que al parecer, luego que las madres de ellos terminan el periodo de gestación, son rechazados por sus tenedores y arrojados a la calle de manera inclemente.