Redacción Buga
El Periódico
La Estación Meteorológica ubicada dentro de las instalaciones de la Fundación Casa de la Ciencia, ha registrado en los primeros días del año altas temperaturas. El termohidrógrafo ha marcado temperaturas entre los 37 y 40 grados centígrados en el día y de 20 grados en la noche, lo que significa que las plantas no alcanzan a procesar en proporciones convenientes el gas carbónico presente en la atmósfera. Esto nos permite concluir que en los tres primeros meses del año, el comportamiento climático será igual al del segundo semestre del año anterior, haciendo una pequeña pausa entre finales de marzo, abril y principios de mayo, que son las épocas convencionales de lluvia.
Si se acompañan estos registros ya mencionados de las graficas obtenidas en el heliógrafo, que fácilmente pueden mostrar el papel quemado, desde las ocho de la mañana hasta más allá de las cuatro, sin interrupción, podremos entender la cantidad de radiación solar que llega a la ciudad en el día, lo que coloca en alerta al Comité Local para la Prevención y Atención de Desastres (CLOPAD), siendo factible los eventos de incendios forestales producidos por altas temperaturas. Estas condiciones hacen necesario que con más frecuencia los habitantes nos convirtamos en vigías de nuestras laderas, avisando al cuerpo de bomberos voluntarios al 119 sobre la presencia de humaradas que puedan ser el indicio del comienzo de un incendio forestal, pues las condiciones climáticas del inicio de año muestran una posibilidad de más del 80% de eventos de esta naturaleza.
Como si esto fuera poco, un grupo de estudiantes dirigidos por miembros de la Casa de la Ciencia, vienen realizando un seguimiento a las manchas solares, esto se puede lograr ubicando el sol por medio de un telescopio y ubicando la imagen de este en una superficie blanca, alejando un poco la hoja donde se proyecta el sol, el tamaño de este aumenta y se pueden apreciar de mayor tamaño. Las observaciones realizadas por el grupo de astrónomos aficionados muestra las manchas solares en mayor tamaño, comparadas con las dimensiones que estas presentan en otras épocas. La hipótesis planteada por el grupo de estudio de la entidad es que la actividad solar está directamente relacionada con este ciclo de presencia de manchas. Esto acrecienta de manera alarmante las temperaturas por esta época del año.
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La Estación Meteorológica ubicada dentro de las instalaciones de la Fundación Casa de la Ciencia, ha registrado en los primeros días del año altas temperaturas. El termohidrógrafo ha marcado temperaturas entre los 37 y 40 grados centígrados en el día y de 20 grados en la noche, lo que significa que las plantas no alcanzan a procesar en proporciones convenientes el gas carbónico presente en la atmósfera. Esto nos permite concluir que en los tres primeros meses del año, el comportamiento climático será igual al del segundo semestre del año anterior, haciendo una pequeña pausa entre finales de marzo, abril y principios de mayo, que son las épocas convencionales de lluvia.
Si se acompañan estos registros ya mencionados de las graficas obtenidas en el heliógrafo, que fácilmente pueden mostrar el papel quemado, desde las ocho de la mañana hasta más allá de las cuatro, sin interrupción, podremos entender la cantidad de radiación solar que llega a la ciudad en el día, lo que coloca en alerta al Comité Local para la Prevención y Atención de Desastres (CLOPAD), siendo factible los eventos de incendios forestales producidos por altas temperaturas. Estas condiciones hacen necesario que con más frecuencia los habitantes nos convirtamos en vigías de nuestras laderas, avisando al cuerpo de bomberos voluntarios al 119 sobre la presencia de humaradas que puedan ser el indicio del comienzo de un incendio forestal, pues las condiciones climáticas del inicio de año muestran una posibilidad de más del 80% de eventos de esta naturaleza.
Como si esto fuera poco, un grupo de estudiantes dirigidos por miembros de la Casa de la Ciencia, vienen realizando un seguimiento a las manchas solares, esto se puede lograr ubicando el sol por medio de un telescopio y ubicando la imagen de este en una superficie blanca, alejando un poco la hoja donde se proyecta el sol, el tamaño de este aumenta y se pueden apreciar de mayor tamaño. Las observaciones realizadas por el grupo de astrónomos aficionados muestra las manchas solares en mayor tamaño, comparadas con las dimensiones que estas presentan en otras épocas. La hipótesis planteada por el grupo de estudio de la entidad es que la actividad solar está directamente relacionada con este ciclo de presencia de manchas. Esto acrecienta de manera alarmante las temperaturas por esta época del año.
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