Otro litigio entre el municipio y la Diócesis de Buga

La historia da cuenta que  dos de los predios de propiedad del municipio de Buga y que  se encuentran en manos de la Diócesis, han sido entregados en comodato por  el entonces Alcalde Gerardo Humberto Durán Materon, el ahora Concejal de Buga.

Redacción Buga

El Periódico

Un agravante y malestar se viene presentando en Guadalajara de Buga por la situación del predio donde se encuentra Medicina Legal.

El caso que viene siendo tratado en las sesiones del Honorable Concejo Municipal, tiene preocupados los cabildantes ya que de no llegarse a acuerdos entre el municipio y la Diócesis, Buga se podría quedar sin este servicio fundamental para las necropsias médico legales.

El tema en cuestión y discusión, es la propiedad del terreno del que se manifiesta por parte de la Diócesis de Buga que pertenece a esta entidad, caso negativo a lo hasta el momento consultado por el Concejo Municipal, donde se observa que en el año 1983 el entonces Alcalde de Buga, Licenciado Gerardo Durán Materon, entregó en administración a 50 años  un área de 10.948 metros cuadrados, en el lote contiguo al cementerio, donde antes funcionaba el basurero de la ciudad entre el Cementerio y lo que hoy ocupa la cancha de futbol de Grasas.

Resulta que para que puedan hacerse las mejoras necesarias como sala de espera, sala de oración, cafetería, área de aseo general y parqueo de los vehículos fúnebres, la Fiscalía y  Medicina Legal y Ciencias Forenses no invierten en lotes ni inmuebles que no sean de su propiedad o que se entreguen en comodato por parte del municipio o la nación y lo que allí se visualiza es que de ser de propiedad de la Diócesis, será necesario el traslado de estas dependencias a otro sector, por lo que el Concejal Gabriel Fontal Grisales propone que se canjee este lote con un área de 420 metros cuadrados que se tienen en el barrio el Divino Niño, sobre la calle 17 entre carreras 14 y 15, donde actualmente funciona un dispensario de la Diócesis de Buga, el que también fue entregado en comodato por el entonces Alcalde de la ciudad, Licenciado Gerardo Durán Materón y así se puedan ejecutar las obras requeridas.

El lote donde actualmente se encuentra el anfiteatro es de 10.948 metros, y se tiene un proyecto para la construcción con una inversión del orden de los 2.000 millones de pesos, los que se perderían si no se logra finiquitar este litigio entre el municipio y la Diócesis, para dar paso y viabilidad jurídica a la Fiscalía y Medicina Legal que puedan adelantar las obras necesarias.

De presentarse el cierre de la morgue en Buga por este alegato en lo referente a la titularidad del lote, los perjudicados resultarían los municipios del área de influencia de Medicina Legal como Ginebra, Guacari, Yotoco, Restrepo, Darién, Buga, ya que deberán llevar los cuerpos a las necropsias a Tuluá como municipio más cercano, con el agravante para las casas funerales de los pagos de peajes por cada paso que se haga por allí, al igual que para los dolientes quienes a más de soportar la pérdida del ser querido, deben derogar unos altos gastos adicionales para cumplir con la documentación requerida por Medicina Legal del municipio donde se efectúen las Necropsias.

“Es de recordar, que la Diócesis en Guadalajara de Buga cuenta con unos predios de propiedad del municipio que en un momento indicado han sido entregados en comodato o para ser administrados y resulta que al paso de los años se han hecho escrituraciones al parecer sin la autorización del municipio, quedando en manos de la Diócesis tal como resultó con el lote que hoy ocupa el Cementerio”, indicó el Concejal Gabriel Fontal Grisales.

Unido a este problema, está el de la CVC como organismo ambiental que ha indicado que a las aguas cadavéricas no se les hace el tratamiento requerido para poder depositarlas a la fuente de desagüe y así no genere contaminación ambiental, lo que resulta mucho más complicado de darse una sanción por parte de la entidad ambiental en la Ciudad Señora.

Sólo resta que las partes en cuestión (municipio y Diócesis), logren llegar a acuerdos para que se libere el resto del lote donde  funciona la Morgue y así puedan adelantarse las inversiones locativas para brindar áreas apropiadas para la preparación de los cadáveres y la espera de los dolientes en Buga.