7.21.2014

Déficit financiero afecta programas de los abuelos

Redacción Buga
El Periódico

Son 85 abuelos del Centro de Bienestar del Anciano de Buga, ubicado en la calle 16 número 7-106, quienes  tocan las puertas de las comunidades, empresas, sector oficial. 
El Centro de Bienestar del Anciano funciona en Buga desde hace 96 años y actualmente alberga 85 adultos mayores, 20 empleadas para su atención y 6 religiosas de la comunidad Terciarias Capuchinas, quienes diariamente dedican tiempo, espacio y amor a estos abuelos que en un pasado no muy lejano contribuyeron notablemente en el desarrollo de una sociedad que hoy les mira con indiferencia, a quienes sus familiares los han dejado en el completo abandono y a su suerte.
Por fortuna existe este centro que desde hace ya muchos años ha venido prestando un servicio que el Estado ha desatendido en sus programas para con la población adulta mayor, y son ellos quienes claman por mejores condiciones para pasar sus últimos días en tranquilidad, esa tranquilidad que quizá les fue ajena y negada en su época de juventud, pues los rastros que quedan en sus manos, sus rostros dan cuenta de las difíciles situaciones que debieron afrontar para levantar sus hogares, a la vez que para entregar lo mejor de sí para el relevo generacional.
De acuerdo a la información entregada por el señor  Gerardo Humberto  Cabrera, quien llega a esta entidad con el ánimo de contribuir con el fortalecimiento de la misma, a la vez de sus huéspedes, el entrante directivo precisó en la urgente necesidad en recaudar fondos a fin de mitigar el déficit que se viene registrando mes a mes por el orden de los 6 millones de pesos, pues es del conocimiento de los bugueños, que el Centro del Hogar del Anciano de la Ciudad Señora no cuenta con ingresos diferentes a los que se perciben por las actividades que se realizan.
“Las Hermanas Terciarias Capuchinas de la Sagrada Familia, fundadas por  el Venerable Luis Amigó y Ferrer OFMC, en el Santuario Nuestra Señora de  Montiel, Benaguacil-Valencia España el 11 de Mayo de 1885, somos una familia convocada por el espíritu de Jesús a vivir con Él, y como Él para servir a los hermanos en medio del mundo”. 
La Congregación, como cuerpo orgánico, se estructura en Provincias, Viceprovincias, Delegaciones y Comunidades Locales, cuya unidad mantiene y anima el gobierno General. 
La Provincia es una agrupación de comunidades locales, presididas por una Superiora Provincial que las gobierna con autoridad ordinaria. Esta estructura expresa el vínculo de comunión, promueve la vitalidad y el crecimiento de la Congregación y favorece la atención de las hermanas y la actividad apostólica.

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