1.20.2014

PERSONAJES QUE HACEN HISTORIA EN BUGA

Francy Mery y su esposo, sinónimo de amor


 Redacción Especial: 
Alberto Marino Castillo Patiño
El Periódico
A sus 80 años cumplidos el pasado 7 de noviembre, la señora Francy Mery Floy, se encuentra felizmente casada con el señor Ismael  Villareal Villareal, quien cuenta con 77 años.
Con dos hijos: Julián Alberto y  Lina María, recuerda que la pequeña empresa familiar de los Cuaresmeros y trasnochados ha pasado de generación en generación, desde los 11 años de edad se puso  al lado de su señora madre Leonor Montufar, ayudándole en la elaboración de estos productos de la gastronomía bugueña, este trabajo unido a las empanadas de Cambray, Bizcochuelos, ha sido el pilar de la economía del grupo familiar.
El Cuaresmero se prepara con maíz curado por espacio de 8 días,  melado, manteca de empella de cerdo, mantequilla, huevos y otros ingredientes secretos de la sazón de doña Francy Mery.
Recuerda que se conoció con su esposo en la casa de su señora madre en la calle 16 entre carreras 9 y 10, porque cerca de allí llegaba don Ismael a almorzar donde una tía suya llamada Teresa, allí empezó este romance cuando ellos tenían mayoría de edad, pues manifiesta que nunca gustó del matrimonio, fue entonces por iniciativa de su señora madre Leonor, quien le manifestaba que se casara para que cuando ella muriera no quedara sola y desamparada en este mundo, entonces lo pensó bien y se dejó flechar por cupido.
Un cierto día estaba don Ismael donde la tía Teresa, cuando se encontraron de frente y con solo las miradas empezó a tramarse el romance de una pareja de enamorados que jamás pensaron estar juntos por tanto tiempo; se cruzaron las miradas al punto de preguntarle don Ismael a doña Teresa su tía, “¿quién es esa muchacha?”, ante lo que ella respondió, “es la hija de doña Leonor Montufar, la vecina, la señora de los Cuaresmeros, y de don Antonio María Concha”.
Es de signo zodiacal Escorpión, se caracteriza por la franqueza la cual siempre ha enarbolado, por eso no tiene enemigos, siempre ha tratado la gente con cariño, con buenas relaciones humanas, es muy apreciada por los bugueños y donde llega se gana el respeto y aprecio de los demás; le pone de mal genio no lograr sus objetivos,  como el que ahora le embarga, al no poder realizar su sueño de cantarle al Señor de los Milagros en el santuario de Buga, ya que según manifiesta, los padres Redentoristas no le han brindado esta oportunidad, pero espera que muy pronto ellos puedan escuchar la composición musical que le hizo al Cristo Milagroso y le permitan interpretarla durante una misa de Sanación.
Otra de sus frustraciones es la de no contar con un “ranchito” propio donde escamparse del sol, el frio y la lluvia, ya que  no ha podido ser incluida en los programas de vivienda de interés social gratuita, o de los programas de vivienda del gobierno nacional como se adelanta actualmente en el norte de la Ciudad Señora.
Manifiesta tener muchas historias, como por ejemplo cuando tenía 11 años cumplidos gustaba irse a dormir al rincón de la cama de su abuela, pero para poder dormir con su abuela debía hacer todos los oficios que le encargaba su señora madre.
Como en igual manera conoció en su época dos  abuelas que les fascinaba verla bailar y cantar, pues fue tanto el aprecio, que se la llevaban a la tienda de los “Micayera”, allí ellas tomaban licor patrocinadas por sus hijos, pero la joven Francy Mery no probaba el licor,  pero este regalo lo obtenía gracias a la ayuda que le daba a su madre en los oficios del hogar. Desde temprana edad gustó de bailar, aunque nunca ha consumido licor, eso le ha permitido gozar de buena salud y contar con los años que hoy le permiten ver el desarrollo de su ciudad natal.
Perteneció por más de 10 años al grupo de Adultos Mayores que dirige la señora Miriam de Montenegro.
Viejoteca que se respete no puede eximirse de la presencia y del baile de la pareja conformada por Francy Mery y don Ismael, se goza el bailoteo sin requerir de estar bajo los efectos del licor, del cigarrillo u otras bebidas embriagantes, ha sido muy cuidadosa de su salud.
Todas las noches muy temprano antes de entrar en su cama, pide a Dios por todos sus amigos, familiares, vecinos, por los niños, los adultos mayores desamparados, por la gente que vive en la calle sin un techo que los proteja, clama al Dador de la vida para que cese la violencia, la maldad.
Se precia de ser correspondida por el Señor Presidente de Colombia, Doctor Juan Manuel Santos Calderón, a quien le ha escrito cerca de cuatro veces, recibiendo contestación de sus inquietudes, por ello se  encuentra animada en solicitarle al Jefe del Estado colombiano, que le dé la oportunidad de pasar sus últimos días al lado de su esposo en una casa propia, donde pueda tener aves de corral, plantas ornamentales y en qué entretenerse, ya que por la difícil situación económica por la que atraviesan, no ha podido volver a vender los Cuaresmeros y Bizcochuelos.
Manifiesta no haber tenido una verdadera niñez para jugar con muñecas, por ello ahora se entretiene con las muñecas que le han obsequiado, las cuales cuida como si fueran parte de su niñez; gusta de la cocina, prepara deliciosos platos caseros como el sancocho de gallina, los frijoles, carne asada y los verdaderos bisteak, los que gustan mucho a su paladar.
“Los artistas me pelan”, manifestó sonriente durante la entrevista exclusiva al Semanario El Periódico, tiene gratos recuerdos y fotografías que logró con artistas de talla nacional e internacional, como Darío Gómez, el Charrito Negro, entre otros.
Guarda en su baúl, una tarjeta de presentación que cierto día le obsequio en un paquete de 2.000 unidades, el  doctor Freddy Hernando Libreros Henao, para que repartiera entre su clientela con la dirección de donde residía, sus datos personales y los productos que vende, se muestra muy agradecida por ese apoyo recibido.
A pesar de los años y las múltiples dificultades, esta pareja de esposos continúan juntos, pues manifiestan que  el secreto ha sido el diálogo, el entendimiento, la confianza y la fidelidad, factores que nunca ha faltado en su hogar, unido a que no se guardan secretos, por ello no hay cabida para los celos de una franca y limpia relación sentimental.
Don Ismael, con lágrimas en sus ojos, pidió a Dios que nunca lo aleje de ella ni los separe, puesto que la ama, respeta y la valora mucho. Espera que la bendición de Dios le abrigue para que en la temporada de Semana Santa venidera pueda salir a vender los Cuaresmeros, Bizcochuelos, Empanadas de Cambray, de la mano de su esposo, amigo y compañero de múltiples batallas.
Cuando se realizó el Segundo Reinado del Adulto Mayor en el mes de septiembre del año 
2006, ella recuerda que la decisión para el jurado calificador no fue fácil, pero finalmente ese día 1 de septiembre decidieron darle el título De Segunda Reina Municipal del Adulto Mayor a Francy Mery Floyd, quien representó al grupo de la Tercera edad del Imder, del que hizo parte durante 6 años; su experiencia en estos grupos es de más de 25 años, a eso le debe,  según ella, su tranquilidad en el escenario; ha participado en presentaciones artísticas, culturales, musicales además de ser experta bailarina con su esposo que desde hace más de 25 años le sigue la corriente en pertenecer a grupos de la tercera edad, ha tenido guarderías de ancianos y niños. La segunda Reina del adulto mayor se ha ganado no sólo la corona y el reconocimiento de la ciudadanía bugueña, también el derecho de representar a Buga en el certamen departamental que se realizó el año 2007. Fue Elmer Alberto Suaza quien la declaró “Reina de las Viejotecas”.
En agosto se ganó en Riofrío un premio con la interpretación de la canción, “Al cristo milagroso”, para lo cual estuvo vestida con el traje de una india, recibiendo el aplauso de los representantes de los 42 municipios del Valle del Cauca.

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