11.24.2014

“Rector de la regional de Univalle falta a la verdad con imprecisiones y acusaciones contra ex alcalde”

Enrique Ramos Calderón - Rector UniValle
Redacción Buga
El Periódico

La negligencia, la falta de gestión y el elitismo al que han querido llevar los directivos de la Universidad del Valle a la Institución, no ha permitido que se construya en la zona norte estrato uno de Guadalajara de Buga su Campus universitario; pues dese hace 17 años le entregó el municipio por orden del Concejo a la Univalle 44.300 M2 para que construyeran su claustro y los directivos no hicieron nada porque querían construir el Campus en la zona sur o estrato 6 en Guadalajara de Buga.

Como se recordará, en el año 1995 el Concejo de Guadalajara de Buga mediante acuerdo No. 037 del año en mención, autorizó la construcción de un polo de desarrollo educativo, cultural y social en el norte del municipio, por lo que autorizó la venta a la Universidad del Valle de un terreno de 44.330 M2 para la construcción del Campus para la sede Buga.
Fue así como en1.997 mediante escritura pública, quedó cerrado el negocio entre el municipio, siendo alcaldesa Gloria Estella Sánchez Sepúlveda y la Universidad del Valle en cabeza del rector Jaime Enrique Galarza Sanclemente, quien siempre se mostró dispuesto en adelantar las obras necesarias.
Freddy Hernando Libreros Henao, Ex - Alcalde de Buga
Para el Concejal Gabriel Fontal Grisales: “Irresponsables e injuriosas me parecieron las palabras del señor rector de la institución educativa, Enrique Ramos Calderón, cuando manifiesta que el culpable del abandono o invasión del lote de la Univalle fue el ex alcalde Freddy Hernando Libreros Henao, por los directivos haberle permitido utilizar una franja del lote para construir una escombrera transitoria; de recordar que si no fuera por esa escombrera, otro sería el panorama para el abandonado lote de Univalle, por cuanto estaría invadido por los mismos que negociaron o vendieron el interior del predio”.
Al consultar al ex alcalde Freddy Libreros, sobre el tema, indicó que bajo ningún punto se ocupó terrenos negociados con la Universidad, puesto que la escombrera transitoria queda sobre la continuidad de la carrera 10 y el lote pertenece al municipio, más no a la Univalle; en igual manera señaló que el deber de encerrar el lote y de ponerle vigilancia si no se adelantaría la construcción rápidamente, es de la Universidad y no sería responsabilidad del municipio, ya que se incurriría en un detrimento al fisco municipal, por ser un lote de propiedad privada.
Entre tanto, Fontal Grisales precisó que: “No podemos tapar el sol con las manos para decirle una mentira al pueblo y a la comunidad estudiantil, cuando la verdad de todo esto obedece a la falta de gestión de los directivos del Alma Mater para cumplir con esa meta o ese sueño de construir el Campus universitario; ha existido más compromiso por parte de los estudiantes y del gobierno local que de ellos, porque les ha faltado voluntad política a sus directivos”. 
No se puede desconocer que durante la administración del Doctor Freddy Hernando Libreros, se generaron espacios de apoyo para que se diera el proyecto de construcción, sin que existiera respuesta positiva por parte de los directivos en Buga y de la regional, cabe entonces preguntar. ¿Dónde quedó la primera piedra que se colocó por parte de los directivos de Univalle en el lote negociado?, lo mismo que del aviso que indicaba que “en este sitio se construirá el Campus académico de la Universidad del Valle”. 
Cabe anotar que la entonces directora de la sede Buga, Licenciada Yolanda Domínguez Valverde, siempre se opuso a la construcción del Campus Académico en el lote en cuestión, porque según ella representaría un retroceso en el proceso de aprendizaje de los estudiantes, a más de ser un sector de peligrosidad para ellos, olvidándose que en muchas ciudades del Valle, las sedes quedan aún en sitios muy apartados del centro poblado, o que en el norte de Buga por años ha permanecido y se ha desarrollado el proyecto académico con la TEPA; o desconocer  que la mayoría de los estudiantes de esta sede provienen de la clase popular y no de los de alta alcurnia.
Resulta importante entonces que si los estudiantes no exigen resultados a corto plazo a las directivas, las mismas terminarán vendiendo el predio al mejor postor, no olvidemos que ellos mismos le ofrecieron al municipio en venta y éste les ofreció la suma de $2.815 millones de pesos y un predio de 8.290 M2 contiguo a Torres de Alicante.

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