Redacción Buga
El Periódico
Como un mecanismo de prevención vial en el casco urbano, la Administración Municipal adelanta en la actualidad un programa de instalación de reductores de velocidad denominados "policías acostados", en sectores neurálgicos y que de acuerdo a estudios realizados, se ha encontrado son de alta accidentalidad por el tráfico permanente de toda clase de vehículos automotores, bicicletas y de tracción animal.
Es así como a través de la Secretaría de Tránsito, se programó este trabajo en algunas vías, esto para que los conductores se vean obligados a reducir la velocidad en los dos sentidos de las vías; en el caso de las cercanías a los planteles educativos, se han instalado estos reductores, como sobre la calle 19 con carrera 10, otro sistema se encuentra a la altura de la Carrera primera con calle 12 inmediaciones del parque la Revolución.
La idea con esta implementación es evitar la accidentalidad ante la imprudencia de los conductores de vehículos automotores y de los peatones que se atraviesan en las vías, sin percatarse del peligro. Este hace parte del programa de prevención vial propuesto por el Secretario de Tránsito, Germán Alberto Grajales, desde su llegada a esta cartera local, y que ha formulado importantes ideas al mandatario Freddy Libreros en aras de garantizar la movilidad en el casco urbano.
E"stos reductores cuentan con las especificaciones requeridas para proteger las partes de los automotores, y no quedarán brechas para el paso de bicicletas o motos como en otros casos, pues la idea es que toda clase de vehículo se vea obligado a reducir la velocidad; de hecho se enlucirán con pinturas reflectivas para la perfecta visibilidad diurna y nocturna", dejó conocer el funcionario de tránsito y transporte local. Buga es una ciudad que ha mejorado en este aspecto y en lo concerniente a la malla vial, cada vez busca tener vías en óptimas condiciones para garantizar el transporte vehicular; es cierto que se requiere una alta y inversión, además de la constancia en el mantenimiento de éstas, por cuanto el deterioro es frecuente a raíz del paso vehicular, pero que los bugueños en debida manera pueden contribuir con el programa.
En cuanto a la instalación de los reductores en otros sectores de la ciudad como la carrera 18 entre calles 8 a la 16, es de análisis para el organismo de tránsito, debido a que esta vía es utilizada por las empresas dedicadas al transporte de mercancías y por la condición de los vehículos, llevan una velocidad moderada.
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Como un mecanismo de prevención vial en el casco urbano, la Administración Municipal adelanta en la actualidad un programa de instalación de reductores de velocidad denominados "policías acostados", en sectores neurálgicos y que de acuerdo a estudios realizados, se ha encontrado son de alta accidentalidad por el tráfico permanente de toda clase de vehículos automotores, bicicletas y de tracción animal.
Es así como a través de la Secretaría de Tránsito, se programó este trabajo en algunas vías, esto para que los conductores se vean obligados a reducir la velocidad en los dos sentidos de las vías; en el caso de las cercanías a los planteles educativos, se han instalado estos reductores, como sobre la calle 19 con carrera 10, otro sistema se encuentra a la altura de la Carrera primera con calle 12 inmediaciones del parque la Revolución.
La idea con esta implementación es evitar la accidentalidad ante la imprudencia de los conductores de vehículos automotores y de los peatones que se atraviesan en las vías, sin percatarse del peligro. Este hace parte del programa de prevención vial propuesto por el Secretario de Tránsito, Germán Alberto Grajales, desde su llegada a esta cartera local, y que ha formulado importantes ideas al mandatario Freddy Libreros en aras de garantizar la movilidad en el casco urbano.
E"stos reductores cuentan con las especificaciones requeridas para proteger las partes de los automotores, y no quedarán brechas para el paso de bicicletas o motos como en otros casos, pues la idea es que toda clase de vehículo se vea obligado a reducir la velocidad; de hecho se enlucirán con pinturas reflectivas para la perfecta visibilidad diurna y nocturna", dejó conocer el funcionario de tránsito y transporte local. Buga es una ciudad que ha mejorado en este aspecto y en lo concerniente a la malla vial, cada vez busca tener vías en óptimas condiciones para garantizar el transporte vehicular; es cierto que se requiere una alta y inversión, además de la constancia en el mantenimiento de éstas, por cuanto el deterioro es frecuente a raíz del paso vehicular, pero que los bugueños en debida manera pueden contribuir con el programa.
En cuanto a la instalación de los reductores en otros sectores de la ciudad como la carrera 18 entre calles 8 a la 16, es de análisis para el organismo de tránsito, debido a que esta vía es utilizada por las empresas dedicadas al transporte de mercancías y por la condición de los vehículos, llevan una velocidad moderada.