Serio peligro representa la pared o muro exterior de la antigua Estación del Ferrocarril sobre la carrera 19 con calles 7 y 8.
Redacción Buga
El Periódico
Inminente peligro representa para la comunidad el estado en que se encuentran las paredes que cubren el exterior de lo que fue la Estación del Ferrocarril en Buga.
La situación se viene presentando desde hace varios años, sin que hasta el momento se hayan tomado medidas tendientes a erradicar este peligro, pero para los transeúntes, cada vez preocupa más que deban hacer su tránsito por allí, teniendo que utilizar el andén para evitar ser atropellados por los vehículos y así llegar a sus lugares de destino.
Sería conveniente que la empresa que actualmente tiene a su cargo la prestación del servicio de cargue y descargue de mercancía en este terminal, acondicionen los muros a que hacemos referencia, porque al menor movimiento telúrico, se vendrán al piso y podrán causar lesiones en quienes pasen por el sector
El riesgo es latente y de acuerdo a lo manifestado por los peatones, conductores de vehículos automotores y líderes comunales de los barrios inmediatos, se puede observar que las paredes, por fortuna, se han inclinado hacia el interior del lote baldío, de lo que en otrora fue la estación del tren; de ser lo contrario, esta pared en ladillo, estaría quizá en el piso. Es así como esta construcción no cuenta con vigas de amarre para proteger los muros o paredes, por tal razón y con el paso del tiempo, han declinado, como expresando el cansancio y deseos de renovación o mantenimiento.
Ahora y con la puesta en marcha del terminal de cargue y descargue de mercancía con la empresa Ferrocarril del Oeste, sería conveniente le presten atención a esta denuncia que hacen quienes se ven enormemente acosados por el peligro que diariamente les rodea al pasar por el sector.
Al inicio de la pared en el extremo sur, le han cubierto con una especie de plástico, al parecer para evitar que los orates, mendigos y pordioseros se aposenten allí, pero como que no se han fijado en el peligro que constantemente afecta las personas que se rebuscan como braseros, en la báscula del frente, al igual que los obreros que se ubican en inmediaciones al cementerio pero que constantemente se les ve corre por esta avenida tras de un "camellito", como ellos le llaman al trabajo como jornaleros.
El Periódico
Inminente peligro representa para la comunidad el estado en que se encuentran las paredes que cubren el exterior de lo que fue la Estación del Ferrocarril en Buga.
La situación se viene presentando desde hace varios años, sin que hasta el momento se hayan tomado medidas tendientes a erradicar este peligro, pero para los transeúntes, cada vez preocupa más que deban hacer su tránsito por allí, teniendo que utilizar el andén para evitar ser atropellados por los vehículos y así llegar a sus lugares de destino.
Sería conveniente que la empresa que actualmente tiene a su cargo la prestación del servicio de cargue y descargue de mercancía en este terminal, acondicionen los muros a que hacemos referencia, porque al menor movimiento telúrico, se vendrán al piso y podrán causar lesiones en quienes pasen por el sector
El riesgo es latente y de acuerdo a lo manifestado por los peatones, conductores de vehículos automotores y líderes comunales de los barrios inmediatos, se puede observar que las paredes, por fortuna, se han inclinado hacia el interior del lote baldío, de lo que en otrora fue la estación del tren; de ser lo contrario, esta pared en ladillo, estaría quizá en el piso. Es así como esta construcción no cuenta con vigas de amarre para proteger los muros o paredes, por tal razón y con el paso del tiempo, han declinado, como expresando el cansancio y deseos de renovación o mantenimiento.
Ahora y con la puesta en marcha del terminal de cargue y descargue de mercancía con la empresa Ferrocarril del Oeste, sería conveniente le presten atención a esta denuncia que hacen quienes se ven enormemente acosados por el peligro que diariamente les rodea al pasar por el sector.
Al inicio de la pared en el extremo sur, le han cubierto con una especie de plástico, al parecer para evitar que los orates, mendigos y pordioseros se aposenten allí, pero como que no se han fijado en el peligro que constantemente afecta las personas que se rebuscan como braseros, en la báscula del frente, al igual que los obreros que se ubican en inmediaciones al cementerio pero que constantemente se les ve corre por esta avenida tras de un "camellito", como ellos le llaman al trabajo como jornaleros.