Bugueños piden la continuidad al andén peatonal del norte

Redacción Buga

El Periódico

Ante el constante movimiento y circulación vehicular que se registra sobre la doble calzada en el sector Sur que conduce a la glorieta de Lechugas o “La vuelta del cheque”, la población estudiantil de la Casa Hernando Ospina, adscrita al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar en Buga, se ha pronunciado acerca del inconveniente constante que deben asumir por la falta del andén o paso peatonal extendido que inició en este sector y quedó a medias.

Diariamente al inicio de clase y al terminar las jornadas educativas, los niños y jóvenes quedan expuestos al inminente peligro por el movimiento vehicular que se registra en el sector, siendo una de las entradas del costado Norte al municipio.

Inentendiblemente, las ejecuciones de los gobiernos municipales de turno no han sido lo suficientes como para contrarestar el alto grado de peligrosidad al que resultan expuestos los niños y aún quienes de costumbre realizan las prácticas deportivas y de acondicionamiento físico en la mencionada calzada.

Se nota el desentendimiento de los gobernantes de turno, quienes al parecer ni siquiera se han dignado movilizarse por el sector para constatar la temible situación de riesgo, o al menos que lo hagan sus delegados; hoy por hoy, el andén muere a pocos metros del inicio de la obra y se oculta la línea en medio de la manigua que también se ha apoderado de este transitado sector al Norte de la ciudad.

Quedan en vilo una vez más las palabras y frases alusivas, manifestando que los niños son el futuro de Colombia, pero a la hora de la verdad, son sólo promesas del momento, por cuanto no se incluyen en los programas de desarrollo municipal obras de cemento como esta, que conduzcan de manera positiva al cuidado y protección de la integridad física de los niños y adolescentes.

En Buga se llevan años ofreciendo esta obra y no es de ahora o que se quiera tildar la presente administración o la anterior, esto data de muchos años atrás, porque si bien es cierto, la Casa Hernando Ospina lleva funcionando en esta ciudad desde el año 1.952, y hasta la fecha, de no ser por la obra de doble calzada que se ejecutara durante la Administración de la Ingeniera Civil, Gloria Estella Sánchez Sepúlveda, este importante centro de atención a los niños y jóvenes estaría en el cuarto del olvido.

Han notado quienes tienen la oportunidad de pasear por este sector, del peligro al que constantemente quedan expuestos tanto los niños y jóvenes que se educan y capacitan en este centro, además de las personas que salen a disfrutar del aire fresco y de las actividades de gimnasia?, Donde están los programas de desarrollo y expansión municipal que no contemplan temas y áreas como este?. Es el momento de hacer un alto en el camino y  ponerle seriedad a la cosa, señores.