El Periódico
La entrega tiene un sentido especial porque se trata de familias que, además de haber abandonado sus predios, también perdieron familiares en la masacre cometida en Buga por las AUC, en el sector de Alaska.
El 10 de octubre de 2001 empezó el viacrucis de los pobladores de Alaska, con la muerte de 24 campesinos que fueron asesinados a sangre fría y por la espalda, después de llamarlos por lista, bajarlos de un bus escalera y hacerlos correr.
Dentro de los desplazados se encontraban las 7 familias que recibieron los títulos de sus tierras junto a los subsidios para proyectos productivos, lo que les permitirá recuperar algo de lo perdido por cuenta de la guerra.
Estas familias, al igual muchos campesinos, tuvieron que albergarse en un Coliseo de Buga por varios años. Otros, se dispersaron por distintos municipios del Valle y Cauca, con tal de no volver a transitar por las pequeñas vías que comunican los corregimientos y veredas de El Placer, La Habana, La María, La Magdalena, Alaska, La Mesa, Río loro, Nogales, El Diamante, Frisoles, La Florida y Tres Esquinas, donde paramilitares de las AUC dieron muerte a cientos de campesinos por ser, según ellos, auxiliadores de la guerrilla.
Durante el evento, el director general de la URT, Ricardo Sabogal Urrego y el director de la ANT, Miguel Samper Strouss, dieron a conocer a la Gobernadora, Dilian Francisca Toro, a los alcaldes del departamento y a los campesinos asistentes el papel que juegan las dos entidades en el escenario de posconflicto, asimismo explicaron el primer punto del acuerdo final entre el Gobierno y la Farc, “Hacia un nuevo campo colombiano: Reforma Rural Integral (RRI)”.
Además de la entrega de tierras y proyectos productivos, las víctimas pudieron conocer y acceder de manera directa y confiable a la oferta institucional que llevaron las entidades adscritas al sistema Nacional de Reparación Integral a las Víctimas (Snariv).
El Alcalde de Buga, Julián Latorre Herrada, indicó que en reunión privada sostenida con el Director de la Agencia Nacional de Tierras, Miguel Samper y con el Director de la Unidad Nacional de Restitución de Tierras, Ricardo Sabogal, les solicite la legalización de predios y terrenos rurales que están en manos del INCODER para desarrollar plantas de potabilización, construcción de sedes educativas y reubicación de desplazados.
El Valle del Cauca es uno de los departamentos clave para el desarrollo de la nueva política agraria del país, de cara a los desarrollos del Acuerdo Final firmado en La Habana (Cuba) entre el Gobierno Nacional y las FARC.
En ese sentido, el Director de la Agencia Nacional de Tierras (ANT), Miguel Samper Strouss, anunció este jueves en Guadalajara de Buga las principales acciones que, en materia de acceso y titulación de tierras, se desarrollarán en el departamento, donde además se priorizarán municipios de cara al posconflicto.
Dentro de la gira nacional que realiza la Agencia para socializar la nueva política de ordenamiento social de la propiedad rural, este jueves se firmó en Guadalajara de Buga el gran “pacto por la Tierra”, entre la gobernación y los alcaldes del departamento junto con la Unidad de Restitución de Tierras.
En la antigua Estación del Ferrocarril del municipio de Buga se dieron cita centenares de campesinos, organizaciones rurales y étnicas, juntas de acción comunal, y representantes de entidades estatales y organismos privados, para decirle sí a la nueva visión del campo colombiano y firmar el gran “Pacto por la Tierra”.
El acto estuvo presidido por la Gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, el Director de la Agencia Nacional de Tierras y el director de la Unidad de Restitución de Tierras, Ricardo Sabogal, quienes presentaron a los cerca de 2.000 campesinos provenientes de diferentes rincones del departamento las funciones que cada una de las entidades cumplirá en la implementación de los Acuerdos firmados en La Habana (Cuba) y en particular el punto sobre Reforma Rural Integral.
Se estima que en el Valle del Cauca la informalidad en la propiedad de la tierra es del 40%, al tiempo que el 32% no tiene un uso adecuado y un 70% son microfundios de menos de tres hectáreas.
En Buga se firmó el pacto que devolverá tierras y dará proyectos productivos a los campesinos: "Hay muchas tierras en extinción de dominio inutilizadas, mientras que muchos campesinos las están necesitando", exclamó la gobernadora Dilian Francisca Toro, motivó los aplausos de los miles de campesinos de diferentes municipios del departamento presentes en Buga con motivo de la firma del “Gran pacto por la tierra”, en el que se entregaron títulos de tierras a siete familias y se destinaron $1.000 millones para proyectos productivos de trabajadores del campo. "Vamos a titular todas las tierras informales de los campesinos del Valle del Cauca", aseguró el Ddirector de la Agencia Nacional de Tierras, Miguel Samper, y agregó que 4.400 hectáreas de los narcotraficantes pasarán a manos de los campesinos. La mandataria departamental, a quien el Alcalde de Buga le valoró la destinación de $1.800 millones para la Ciudadela Educativa El Placer, reiteró el compromiso de la región con el desarrollo del campo, y puntualizó: "el primer acuerdo de La Habana es el más importante, porque incluye la inversión social, la construcción de paz desde el campo; el acceso a la tierra a los campesinos que no tienen y la titulación de las mismas. Cuando mejoremos la calidad de vida podemos decir que tenemos la paz estable y duradera que anhelamos", al tiempo, insistió en la importancia de votar el 2 de octubre por el SÍ a la paz.