2.14.2012
Fructífero balance social presenta la Casa de la Ciencia
Redacción Buga
El Periódico
Las Fundaciones son instituciones que tienen un fin social, están constituidas para cumplir una tarea en bien de las comunidades donde se crean. Estas entidades deben realizar actividades que permitan su sostenimiento, pero que a la vez reinviertan los recursos en actividades de orden solidario. En este orden de ideas, desde su creación en el año 2004, la Fundación Casa de la Ciencia de Guadalajara de Buga, ha mostrado un exitoso balance social, el cual es muy halagador desde los últimos dos años. La entidad que tiene como visión ser eje fundamental en la preparación inicial de los niños y jóvenes que jalonarán el desarrollo científico de la región, presta servicios educativos de laboratorio de biología, física y química a diversas entidades educativas de Buga, Presidente y es visitada por el Liceo Juvenil El Rodeo de Santiago de Cali, de allí cubre sus gastos básicos que consisten en tener un contador, una persona para realizar el aseo de la entidad, un docente de planta y la compra de insumos para la realización de las actividades.
Aunque en los balances generales de la Casa de la Ciencia los activos y los pasivos cada año dan prácticamente sumas iguales, la entidad tiene como propósito y obra social a la vez, la ejecución de programas que beneficien a las comunidades menos favorecidas y a los niños y jóvenes con habilidades hacia el campo científico, es así como se desarrollan una serie de programas que no tienen costo alguno por parte de los niños y jóvenes que asisten a ellos. En primera instancia la entidad tiene un programa que beneficia a estudiantes de grado noveno, diez y once, válido para cumplir con el servicio social estudiantil. Este programa llamado Centro de Investigaciones Bio – Ecológicas (C.I.B.E.), favorece a unos 50 estudiantes cada año, se realizan con ellos 32 talleres, cada taller tiene un costo aproximado por educando de $ 15.000, invirtiendo cada año en cada estudiante unos $ 480.000, lo que equivale a un balance social de $ 24.000.000 en pro de la formación de las promesas científicas de la región y del país.
Otros programas son los Clubes de Ciencia y Astronomía, en este se pretende aficionar los niños de las escuelas al estudio de las ciencias naturales, en el caso del Club de Ciencias es dirigido por estudiantes destacados del Centro de Investigaciones Bio – Ecológicas (C.I.B.E.), quienes realizan demostraciones con los infantes en torno a los principios científicos más destacados. Con el Club de Astronomía se pretende formar individuos conocedores del universo y del estudio de los astros, que se ubiquen en el cielo nocturno y puedan reconocer un planeta, una estrella, una constelación, etc. También la entidad asesora proyectos de investigación juvenil por procesos, donde los niños y jóvenes proyecten su estudio hasta obtener resultados concretos.
La Casa de la Ciencia también es benefactora cultural de la casa Hogar, entidad apoyada por el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, las niñas de este hogar reciben por parte de la entidad de apoyo educativo, talleres de ciencias o temas solicitados por las coordinadoras de la entidad protectora. Estos esfuerzos de la única Casa de la Ciencia de Colombia pretenden equilibrar la balanza social, en la que sus miembros consideran que los jóvenes de menos recursos económicos deben tener la misma preparación que quienes tienen la posibilidad de acceder a la educación privada, para que mañana compitan sanamente con igualdad de condiciones. En la actualidad se realizan contactos con el Hogar Grupal Rotaritos de la Fundación Rotaria Buga, con el fin de realizar talleres de educación ambiental con infantes de cinco años, creando conciencia por el cuidado del entorno en los pequeños.