El Periódico
Desde el 1 de enero los colombianos comenzaron a enfrentar una cascada de alzas tanto en productos como en servicios, en momentos en que las presiones inflacionarias han continuado aumentando.
El primer golpe al bolsillo fue con la gasolina, la cual fue reajustada en $78 por galón por el Ministerio de Minas y Energía, mientras que apegados al nuevo salario mínimo de $689.454 que subió 7 %, entraron a regir otros reajustes.
La papa, que es uno de los alimentos de mayor demanda en los hogares mantiene precios elevados, por ejemplo, el bulto de 59 kilogramos de papa amarilla se negoció durante la víspera de año nuevo a un precio de $170.000, cuando su precio normal en el mercado es $32.000.
Por su parte, la papa parda retrocedió de $78.000 a $68.000, pero aun así su precio es elevado frente a épocas de cosecha, cuando se cotiza en promedio a $32.000.
El producto que más está pesando en la canasta es el azúcar, ya que el saco de 50 kilogramos saltó de $122.000 a $128.000.
El arroz es otro alimento con tendencia al alza, ya que la arroba mayorista pasó de $33.000 a $34.000, para un ajuste de $1000.
En algunos supermercados, el arroz de primera se vende entre $1500 y $2000 la libra.
Al consultar en las centrales de Abasto de Guadalajara de Buga como son las galerías Central, Satélite y el mercado campesino del barrio La Revolución, se logró evidenciar un alza bastante elevada para productos agrícolas de primera necesidad; así por ejemplo, la libra de papa parda pasó de $500 a $850 la libra; la papa amarilla antes se compraba en $600, ahora está en $1.700 la libra; la yuca antes $1.100, ahora $1.900 y 2.300 la libra; libra de tomate antes $1.000, ahora $1.800; lechuga Batavia antes $1.000, ahora $2.000 libra; libra de lenteja antes $1.000, ahora $2.500; libra de plátano antes $650, ahora $900 representado en una unidad.
Pero no solo en productos de la despensa, el equipo investigativo del Semanario El Periódico logró establecer que también las alzas se ven reflejadas en otros campos, por ejemplo, las multas por infracciones de tránsito aumentarán para los conductores. En el caso de estacionar vehículos en lugares o sitios prohibidos, la multa que para el 2015 estaba en $322.168 quedará en $344.719. La sanción a quienes porten la licencia de conducción vencida que se encontraba en $107.424 en todo el territorio nacional, sube a $114.943. Y no portar la licencia costará $183.830. Asimismo, pasarse un semáforo en rojo valdrá $689.454.
El Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito, Soat, también aumentará en 7 %, pero su valor variará de acuerdo al cilindraje del vehículo y de la fecha en que se adquirió.
No portar el Soat valdrá un salario mínimo, es decir $689.454.
En cuanto al incremento en el precio de los peajes que son administrados por el Invías, estos se reajustarán de acuerdo a la categoría y el alza de las tarifas se efectuará hasta después del puente festivo (12 de enero), para no perjudicar a los colombianos que se desplazan durante estas vacaciones.
Asimismo, por disposición del Gobierno Nacional el pasaporte tendrá un incremento de $6000. En consecuencia, el nuevo valor del pasaporte ordinario quedará en $216.000, mientras el pasaporte ejecutivo sube a $306.000.
Hasta los servicios de salud tendrán un incremento. Tanto las cuotas por citas médicas, servicios de laboratorios y medicamentos, subirán entre $200 y $1900 para los usuarios del régimen contributivo. El incremento en dichas cuotas viene de la mano del alza en el salario mínimo, sin embargo, las tarifas son determinadas por el Consejo Nacional de Seguridad en Salud, el cual las fija de acuerdo al número de salarios mínimos que devenga cada persona.
Según lo anterior, los usuarios de la salud con ingresos por debajo de los dos salarios mínimos tendrán un incremento de $200 en sus cuotas moderadoras. Por otro lado, los contribuyentes, quienes cuentan con sueldos correspondientes a 2 y 5 salarios, cancelarán $28.000; es decir, un aumento de $1900 con respecto al 2015.
No obstante, cabe aclarar que los copagos varían para cada tipo de régimen y que aquellos, quienes tienen el estatus de afiliados del sistema subsidiado, no deben pagar este tipo de cuotas aunque sí deben hacerlo en caso de necesitar un servicio incluido en el Plan Obligatorio de Salud, POS.
El bolsillo de los hogares también se verá afectado por el incremento en los servicios notariales, lo mismo que por los avalúos catastrales y las tarifas prediales.
Matrículas en colegios, cuotas de administración en los condominios, lo mismo que el valor de los seguros todo riesgo para los vehículos forman asimismo parte de los aumentos del 2016.
Durante los recorridos callejeros adelantados por el equipo investigativo de El Periódico, se observó notable disminución de los llamados sancochos de calle, lo que en otrora se convertían en el deleite de la gastronomía los primeros y 6 de enero para calmar guayabo, luego de las rumbas; esto pasó a ser cosa del pasado pues los elevados costos de los productos agrícolas, no permitieron que al inicio del 2.016 desbordaran las ollas y platos atendiendo los muchos comensales en las calles de barrio.
En Buga los restaurantes donde los llamados “corrientazos” tenían un valor de hasta $3.500 en el 2.015, ahora están por el orden de los $4.500 y sin aumentar la cantidad, por el contrario en algunos sitios cobran el pasante adicional.
Y qué decir de las fritangas que en Guadalajara de Buga son tradicionales en diversos sitios, ahora las empanadas se soplaron, pero no de cantidad y calidad, sino en el precio al punto de obtenerse hasta por $1.500 unidad.