Redacción Buga
El Periódico
La reincidencia del propietario de un vehículo de tracción animal al exceder el peso permitido de la carga, obligó al decomiso del caballo utilizado para este trabajo.
El caso se presentó en el sector de la carrera 8 entre calles 14 y 15, cuando después de llamados de atención anteriores, el propietario del animal habría hecho caso omiso a las recomendaciones policiales, lo que habría obligado a la aplicación de la ordenanza 343 del 2012 por conducir vehículo de tracción animal con carga en sobrepeso de 650 kilogramos cuando lo permitido son máximo 500 kilos.
En el operativo realizado por la Fundación de protección animal Paz Animal en conjunto con Policía Ambiental, permitió el decomiso del semoviente. “Estos controles se van a seguir haciendo para evitar que los animalitos sean maltratados”, dijo Camila Ortega, de Paz Animal, y añadió que a los señores carretilleros se les ha socializado la norma sobre los pesos permitidos, los horarios y el estado en que deben mantener los animales, por lo cual no tienen excusa para argumentar desconocimiento de la norma.
El caballo decomisado fue llevado al Centro de Bienestar Animal, mientras que la autoridad competente, en este caso la secretaría de gobierno, aplica las sanciones.
El llamado es a la comunidad para que denuncie este tipo de situaciones al número de la policía ambiental 350 8714653.
La Policía ambiental de la mano con protectores de animales y el acompañamiento de la administración local, continúa atendiendo casos de maltrato animal en la ciudad.
Gracias al llamado de ciudadanos preocupados son varios los casos que en los últimos días han sido atendidos y en los que son los equinos las principales víctimas del descuido y el maltrato por parte de sus tenedores. El primer caso reportado en un sector del barrio La Ventura, fue el de un caballo que deambulaba y que según el subintendente Gabriel Martínez, fue hallado en estado esquelético, con una lesión en la pata trasera y sin una herradura. El segundo caso fue atendido en un sector de La Palomera, cuando un equino quedó atrapado en el lodo, y cuyo rescate se logró después de varias horas.
Lo que llama la atención es la negligencia por parte de algunos propietarios de estos animales, que haciendo caso omiso a la norma, en el caso de la Ordenanza 343, el decreto DAM 115 y la nueva ley 1774 de protección contra el maltrato animal, siguen cometiendo maltrato contra estos seres, en su mayoría usados para labores de carga y tracción de vehículos.
“La unidad ambiental y la policía en general seguirán atentas a cualquier llamado de la comunidad frente a estos casos”, dijo el oficial, quien aclaró que su labor es operativa y que es a la administración municipal a través de la secretaria de Gobierno, a quien corresponde la aplicación de las sanciones a quienes infrinjan la norma.
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