La diócesis de Buga, fue la primera, que el papa Pablo VI creó en Colombia, después del Concilio Vaticano Segundo en 1966. Su primer obispo fue monseñor Julián Mendoza Guerrero, nombrado en enero y ordenado como tal el 5 de marzo de 1967.
La Diócesis de Buga comprende 10 municipios, en su jurisdicción, siendo ellos: Caicedonia, Sevilla, Bugalagrande, Andalucía, Tuluá, Riofrío, Trujillo, San Pedro, Guadalajara de Buga y Guacarí.
Por ello se ha programado un Eucaristía que se oficiará en el parque José María Cabal, el miércoles 29 de junio a partir de las 10:00 de la mañana, misa campal frente a la Catedral, para agradecer a Dios por los primeros cincuenta años de la Diócesis de Buga.
La Diócesis es una jurisdicción eclesiástica de la Iglesia Católica en Colombia, con sede en el municipio de Guadalajara de Buga y hace parte de la provincia eclesiástica de Cali.
Está conformada por las parroquias de los municipios antes mencionados así como sus corregimientos. Su territorio limita al norte con la Diócesis de Cartago, al noreste con la Diócesis de Armenia, al oriente con la Arquidiócesis de Ibagué, al sureste con la Diócesis de El Espinal, al sur y occidente con la Diócesis de Palmira, y al noroeste con la Diócesis de Istmina Tadó.
Además de la catedral, en la diócesis se encuentra la Basílica Menor del Señor de los Milagros de Buga.
El 17 de enero de 1985, el papa Juan Pablo II nombró a monseñor Rodrigo Arango Velásquez, como nuevo obispo de Buga. Tomó posesión el 25 de marzo de 1985 y gobernó hasta el 19 de enero de 2001, cuando se jubiló por llegar a la edad canónica. En esa misma fecha, Su Santidad designó a monseñor. Hernán Giraldo Jaramillo como nuevo obispo de Buga y tomó posesión el 19 de marzo de 2001. El 4 de agosto 1997 se estableció el seminario diocesano de los Doce Apóstoles.
A mediados de mayo de 2012, el papa Benedicto XVI designó como nuevo obispo de Buga a monseñor José Roberto Ospina Leongómez, quien se desempeñaba en aquel momento como obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Bogotá. Sustituyendo a monseñor Giraldo Jaramillo, cuya renuncia fue aceptada tras cumplir la edad canónica de retiro.