BUGA - Una denuncia se viene registrando por parte de las Juntas Administradoras de los acueductos de La Habana y Alaska zona rural de Buga, por el incremento del turismo a las quebradas donde están ubicadas las bocatomas que surten los acueductos.
La Presidenta del acueducto de Alaska Miriam Ramírez, precisó en la urgente necesidad que las entidades de protección ambiental ejerzan control en la zona, especialmente en la cascada El Milagro, de donde se obtiene el agua para el suministro del acueducto rural, la cual ha venido siendo objeto de turistas quienes se bañan en los tanques de almacenamiento, ocasionando contaminación.
Desafortunadamente algunos propietarios de balnearios en Alaska realizan recorridos turísticos por el sector, llevándolos hasta la fuente de agua natural, lo que para ellos resulta ser un atractivo y para las familias una incómoda situación.
La CVC Dar Centro Sur, adelanta la implementación de una medida preventiva a fin de controlar el turismo irresponsable en las cascadas que surten los acueductos a comunidades de los sectores de La Habana y Alaska.
La autoridad ambiental reiteró que dicha actividad a esos lugares está prohibida; “las quebradas no son centros de recreación ni para que la gente se vaya a bañar allá”, dijo la Presidenta del Acueducto de Alaska, al advertir que hasta en semana la gente está subiendo a la quebrada a bañarse y hacer otros tipos de actividades que afectan a los más de 480 usuarios del acueducto.
El funcionario advirtió que la medida preventiva contra este tipo de actividades será dada a conocer en los próximos días una vez se firme. Recordó que a las cascadas como la del Milagroso, solo se puede hacer un turismo contemplativo, es decir un turismo de admirar la belleza escénica del paisaje
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