Redacción Buga
El Periódico
Eran las 10:00 de la mañana del pasado viernes 13 de septiembre, cuando la nana de dos bebés mellizos de escasos 9 meses de edad, fue sorprendida por dos mujeres, una mayor de edad y la otra más joven, quienes irrumpieron la puerta de la casa que se encontraba entre abierta, lanzándose contra un corral donde se encontraban los dos niños con el fin de llevárselos de manera arbitraria.
De inmediato y sin esperar, la dama que se encarga del cuidado de los bebés se interpuso al hurto forcejando con una de las mujeres que de manera brutal la asediaba con golpes e insultos, con el deseo de arrebatarlos. En medio de la trifulca al interior de la vivienda, la mujer protectora alzó un asiento del comedor y lo arrojó contra la agresora logrando detener el robo de los niños.
Los habitantes del sector al escuchar los gritos de la mujer que pedía ayuda, salieron a la calle en pos de evitar el atentado llamando a la Policía, lo que obligó a las dos mujeres que buscaban traficar con los menores a huir del sitio sin dejar rastro alguno.
A la llegada de la Policía, no pudieron evidenciar el acto, ya que las mujeres habían desaparecido del barrio Caracolí al norte de Buga en el Valle del Cauca.
A pesar del nerviosismo de la mujer encargada del cuidado de los niños mientras sus padres trabajan, valerosamente sacó fuerzas físicas para interponerse contra el robo que se fraguaba en su vivienda.
La dama, quien aceptó la entrevista libremente para el Semanario El Periódico de manera voluntaria y con la autorización de los padres de los menores, precisó que gracias al permanente diálogo que sostiene con los progenitores se pudo evitar que estas pretenciosas mujeres lograran los objetivos trazados.
Ahora han redoblado la vigilancia familiar en la vivienda para evitar que las sediciosas regresen en busca de lo que tienen previsto.
Entre tanto, las autoridades conservan retratos hablados de las dos mujeres y esperan que prontamente puedan ser capturadas por intento de robo y tráfico de niños.
La trata de niños, niñas y adolescentes en el país, es una situación que se ha venido incrementando poco a a poco, a partir de diferentes estrategias y modalidades.
El panorama sobre trata de personas en Colombia es preocupante, si se tiene en cuenta que en el 2012 el Valle del Cauca, Antioquia y Quindío concentraron el 79 por ciento de los lugares de origen de víctimas de trata de personas colombianas.
En ese mismo año, los casos de trata interna en Colombia aumentaron un 31 por ciento.
Entre 2003 y 2006, el 20 por ciento de las víctimas identificadas eran menores y, entre 2007 y 1010, el porcentaje se incrementó al 27 por ciento.
Asimismo, según La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), la trata genera 32.000 millones de dólares al año. La trata de personas es el tercer negocio ilícito más lucrativo después del tráfico de estupefacientes y de armas.