Redacción Buga
El Periódico
Lo que hace varios años se vislumbró como un sector de mucha tranquilidad, sano, seguro y habitable, con el paso de los años, la expansión del municipio y del desarrollo, se ha convertido en un gran problema no sólo para los moradores de tan prestigioso sector sino para quienes han instalado sus negocios, empresas e invertido un gran capital en busca de prosperidad para los inversionistas y los trabajadores, unido a sus familias.
Los preocupados moradores de la unidad residencial Portales del Rio se sienten vulnerados en sus derechos y tranquilidad, por cuanto se han aposentado en sus alrededores habitantes de calle, en la parte lindante al río Guadalajara y el parque se ha convertido en un potrero para ganado que pasta allí y deja desde boñiga, orín y las consabidas consecuencias de sanidad que ello representa.
Por fortuna la intervención que en su momento hiciera el Concejal Andrés Felipe Moncayo, oficiando a la policía, al gobierno municipal para que se limpiara el parque, se organizara la iluminación y se adecuaran los juegos infantiles, logra reducir el ambiente de inseguridad que reinaba en este parque, el que ahora pueden utilizar los niños y jóvenes para sus actividades deportivas, desde luego, compartiendo el terreno con el ganado que allí pasta.
Aún peor el problema, con los lotes de engorde que están en frente del conjunto residencial y que rodean el jardín materno infantil Mis años maravillosos.
La oscuridad en las noches por la espesura del bosque y de la maleza de estos dos lotes, es abrumadora, ni siquiera se atreven a salir a comprar en las tiendas aledañas, del temor de ser atacados por los maleantes que se esconden entre la maleza de estos lotes de engorde.
Durante todo el día, los fuertes olores a orín de ganado inunda el ambiente del populoso sector al sur-occidente de Buga, lo cual genera la presencia de zancudos, mosquitos y cuanto insecto volador se una a este banquete; la inseguridad campea a pesar de encontrarse a pocos metros del conjunto residencial la Terminal de Transporte terrestre de pasajeros.
Los niños que dan sus primeros pasos en la educación con calidad que imparte “Mis años maravillosos” deben soportar los apestantes olores por los potreros aledaños en que han convertido el parque del conjunto residencial en el costado sur, en igual manera la presencia de roedores, reptiles y toda clase de animales que salen de los enmalezados lotes que geográficamente tienen encerrado este trascendental templo de la educación, el aprendizaje y la calidad humana para una población ávida de sabios conocimientos.
En la parte exterior del conjunto residencial se han registrado varios robos, incluso a un reconocido periodista de Buga le saquearon la casa en momentos que se encontraba sola; lo mismo sucedió con otros moradores a quienes les sacaron muchas pertenencias, todo por la falta de rondas por parte de la policía y con el agravante de unos lotes enmalezados que no permiten la visibilidad.
Y qué decir de los moto-transportadores, que en su mayoría se instalan en la única calle de ingreso y salida al conjunto residencial, torpedeando la libre movilización vehicular, a quienes hay que pedirles permiso hasta para salir del sector, esto agrava cada vez más la difícil situación en la que se encuentra Portales del Rio al sur–occidente de Buga.
Existe una situación muy delicada a la que las autoridades civiles del municipio y la policía no le están prestando la atención debida, y tiene que ver con los pasajeros que al utilizar la Terminal de Transportes, deben arriesgarse a que en las horas pico, los maleantes se aprovechen de la espesura y lo enmalezado de los lotes para asechar sus presas hurtándole las pertenencias.
En medio de todo este gran problema en el que se encuentran los moradores de Portales del río, Mis años maravillosos, la oficina de Transcalima y la Terminal de pasajeros, se pone en riesgo la inversión que se hace con la imponente clínica médica del sector, al igual que del Colegio Mayor Ciudad de Buga, cuyos estudiantes son también vulnerables a todo este tema de insalubridad y seguridad.