BUGA - “Una máquina de manipulación en redes sociales”. Con esta frase la Ministra de Educación, Gina Parody, describió el lunes la campaña que en su contra está moviéndose en Facebook y Twitter por ciudadanos inconformes con directrices que buscan aconsejar la adopción de manuales de convivencia escolares más incluyentes.
En Buga rechazaron la ideología de género que según manifiestan, el Ministerio de Educación quiere imponer en las aulas de clase.
Desde luego que la propuesta que se ha direccionado desde el ministerio de educación se encamina en generar espacios de conocimientos enfocados en el tema de la sexualidad, lo que para algunos directivos docentes se constituye en un impacto negativo.
El plantón se llevó a cabo en el parque José María Cabal, con la participación de la iglesia católica y de diferentes ideologías religiosas en contra de las medidas a implementar por el Ministerio de Educación nacional sobre la ideología de género, en las instituciones educativas del país.
“Porque los niños son niños y las niñas son niñas”, algunas de las arengas de los asistentes al plantón realizado en el parque José María Cabal de Buga, en la mañana del miércoles, donde el plantón se congregó al pie del busto del General José María cabal.
Durante el transcurso del plantón se escucharon voces de rechazo a esta iniciativa del ministerio de educación nacional.
Dichos críticos se han ido lanza en ristre contra el “Manual de preguntas orientadoras”, cuyo propósito es que los colegios tengan en cuenta consideraciones que reduzcan los riesgos de discriminación de todo tipo, incluido el que podría causarse por la identidad de género.
Una marcha se generó en Buga saliendo desde el parque José María Cabal, la cual surcó algunas calles céntricas en medio de poca asistencia, relativamente el acompañamiento de los integrantes y adeptos de las iglesias que convocaron, y de un minúsculo grupo de estudiantes quienes ni siquiera sabían del porqué de la protesta inducida; este grupo de estudiantes llegó al plantón esperanzados en la búsqueda de lo que se les manifestó de un conversatorio para analizar la propuesta, no para una manifestación de algo etéreo y que aun ni siquiera desde el ministerio de educación se ha establecido con precisión.
En redes sociales, los detractores dicen que sus contenidos vulneran el derecho de los padres a brindar una educación sexual a sus hijos, acorde con sus principios, e incluso han señalado que con ellos se busca llevar una “colonización homosexual a los colegios”. Por eso convocaron marchas “en defensa de la familia y en contra de la ideología de género”, indicó en Buga el activista de la población LGTBI, Alexander Quintero, quien se mostró en desacuerdo por el proceso de manipulación, señalando que esto es un retroceso en la historia de la colonia, volviendo a la inquisición por la que tuvieron que atravesar nuestros ante pasados.
Para la ministra, hay una campaña de desinformación detrás de esa convocatoria; “Buscan aterrorizar a los padres de familia”, dice.
Lo que llama la atención en el caso colombiano es la presencia de campañas de desinformación que no contribuyen a un debate sereno, necesario y analítico.
En ese contexto, el Ministerio planteó el “Manual de preguntas” para ayudar a los centros escolares a adecuarse a la ley, pero sin desconocer la autonomía de esas instituciones. Parody insistió en que son los rectores los encargados de armonizar sus proyectos educativos con la Constitución y la ley.